Narrativa (Page 52)

Estoy sin aire, como tú, hermana. Una bocanada hubiese bastado para que alcanzaras ese trozo de madera. Pero no pudiste. Y aquí estoy, sola, aferrándome a la base de la cama como tú lo debiste haber hecho con aquel improvisado salvavidas. No me queda más que esperar a que paseCuéntame más…

“Los animales deben estar fuera de la casa, ese es su lugar”. Es lo que recuerdo de aquellas vacaciones al final del ciclo escolar, el año en que abandoné la Orden de San Juan Bosco y debía reunirme con mis padres en casa. Era 1991, el año en que noCuéntame más…

Recuerdo el último día que te vi en casa, tenías un dolor extraño cerca del pecho, dijiste que te ahogaba, pero pronto se te pasaría. Yo queriendo que no fuera lo que fue, tratando de salir por la tangente, pero fue imposible; era el día, era la hora. Tú estabasCuéntame más…