Constelación de palabras
(Poema visual)
Tengo una sensación confusa
Tengo una tristeza domesticada
Tengo una pena que ya no grita
Tengo un dolor a contracorriente
Tengo pequeñas lágrimas frente al monitor
Tengo un sombrero de palma en la ventana
Tengo una pena palpitando
Tengo una cita con las amigas
Tengo ideas que exprimir
Tengo tersa la piel
Tengo un sello de amor a la mitad de la espalda
Tengo una promesa de amante
Tengo un número de teléfono que no contesta
Tengo imágenes alegres que me brincan desesperadas
Tengo una vara mágica que puede aniquilar todo
Tengo un vago recuerdo de unos labios pequeños, encontrados
Tengo la imagen de un dedo cicatrizado y sensible
Tengo un cd donde no grave mi risa a su lado y hubiera valido la pena
Tengo piernas fuertes, fuertes y calientes
Tengo imágenes de lugares desconocidos
Tengo un registro de sonrisas infantiles
Tengo una libreta grande y exigente
Tengo un arcoíris café atrapado en cristal
Tengo muchas preguntas como siempre
Tengo la confianza sentada en el regazo
Tengo la ternura queriendo huir, espantada
Tengo música a toda hora
Tengo “mujer no llores”, en chino, bajeada
Tengo unas ganas de hacer el amor muy bien guardado
Tengo una linterna para buscar sirenas
Tengo una tristeza ausente, en silencio
Tengo una esperanza sin brújula
Tengo una excitación musicalizada con banda
Tengo mis manos llenas, apretadas
Tengo tus miedos como botanas para mis cervezas
Tengo recuerdos infantiles que se hacen uno contigo
Tengo una casa encima, una parte del cuerpo roto, un rescate
Tengo una manta naranja para el frío de estar sola
Tengo un alacrán desmembrado
Tengo la palabra hiriente y sin sentido
Tengo mis pechos en tus manos
Tengo el cuerpo escondido
Tengo una pregunta: ¿tú que tienes?
Tengo una casa en proceso
Tengo una confianza que te tambalea
Tengo una ventana sin límites
Tengo tuberías sin lugar
Tengo a la tierra tomando forma
Tengo a Gaudí jugando en el jardín
Tengo botellas vacías para recordar mis pesadillas
Tengo una ventana azul para sanarme
Tengo una galaxia cósmica donde estás perdido
Tengo un recuerdo y una memoria jugando ajedrez
Tengo algo que decir que no recuerdo
Tengo una mancha de tinta en mi dedo
Tengo películas pendientes, quietas, en sus estuches
Tengo un paisaje verde entre edificios grises
Tengo quijotes, molinos de viento y rocinantes repetidos hasta hacerse Escher
Tengo una mesa redonda que no rueda porque le pesa el cristal
Tengo una taza fuera de lugar
Tengo fotos, fetiches y ángeles ordenados fuera de mi juicio
Tengo mi respeto intacto
Tengo la necesidad de hacerte presente
Tengo pellejitos en los labios
Tengo ganas de borrar tres meses de un jergazo
Tengo una memoria en orden conspicuo
Tengo los años 50s en mi mano derecha
Tengo sus círculos concéntricos pidiéndome girar
Tengo el agua negra que contiene a mi placer
Tengo atenciones que organizar
Tengo un libro sobre la frontera donde no estas
Tengo llamadas perdidas de números que no conozco
Tengo un canto de lotería en el alma
Tengo mis senos defendiendo mi corazón
Tengo tu boca en ellos
Tengo los idiomas mezclados con los orígenes
Tengo el gozo del movimiento
Tengo la vida y ella, me tiene a mí
Tengo a mis ángeles colgados en mi nombre
Tengo solicitudes pendientes
Tengo peticiones a mí, bien formuladas
Tengo plegarias a punto de cantarse
Tengo un milagro a punto de cumplirse
Tengo mis ojos esperando sus destellos
Tengo a mi dragón protegiendo mi destino
Tengo la seguridad de estar en tu deseo
Tengo tu culpa paralizándote, cumpliendo se misión
Tengo a mi gata en mis brazos
Tengo mis oídos para escuchar lo que no quieres saber
Tengo un torrente ruidoso de tu boca, pero no te oyes
Tengo tu pasado abrumando tu presente
Tengo un grupo de perros peleando su fidelidad
Tengo mapas carreteros semidoblados
Tengo aves del paraíso en almácigos
Tengo un autoreconocimiento feroz
Tengo palabras soeces riéndose antes de salir de mi boca
Tengo el atrevimiento de confesarme
Tengo la sanación de la escritura
Tengo una carta amorosa con mi nombre en azul pegada en el refri
Tengo mi fe tibia como la menta
Tengo, escúchame: la seguridad de haber estado en tu corazón
Tengo la turbulencia de los granos fermentados
Tengo el cuenco de la almohada hecha con tu descanso
Tengo deseos…eso es todo: deseos
Tengo el baile en mi sistema circulatorio
Tengo mis manos levantando mi falda para tus ojos
Tengo la quietud embalsamada
Tengo el color aceituno en mis ojos
Tengo la voluntad adolorida en la espalda
Tengo mis uñas azules
Tengo el honor de volar con un hada pelo rojo
Tengo a Himalaya en mi vida
Tengo sus conjeturas sobre la guerra y la paz
Tengo un reenvío sobrio, rápido y contradictorio
Tengo las quiero y los no puedo
Tengo jotas y ges dándose un quien vive
Tengo un pacto de amor conmigo misma
Tengo por hijo un héroe
Tengo un caballero bien armado
Tengo una lista interminable de lo que tengo
Tengo el ego herido
Tengo la cabeza fuera del agua
Tengo mi destino en pleno diseño
Tengo una despedida cariñosa
Tengo mi intensidad juzgada fieramente
Tengo espacio en una agenda llena de fotos
Tengo un email paralizado
Tengo un dado sin corazón
Tengo una frase cayendo de canto
Tengo unos costales de yute aburridos, esperando
Tengo mi desazón gritando
Tengo mi corazón estrujado
Tengo tu imagen acechando
Tengo tus confesiones de amor tiritando
Tengo nuestro desencanto sin lugar
Tengo regalos que creí promesas
Tengo la certeza de que todos nos equivocamos
Tengo otra certeza: la de la curación del abrazo
Tengo la paz en el saber que siempre hay mañanas
Tengo la aceptación de mi monologo
Tengo letras para tus ojos
Tengo un brazo para ti
Tengo consuelo para tu guerra interna
Tengo mi integridad aquí, junto a mí
Tengo tu huida de ti mismo acompañándote a todos lados
Tengo mi encanto, todo, y tu ceguera
Tengo la presencia de tu pasado aplastando tu futuro
Tengo el cansancio que deja el juicio a los otros
Tengo la pluma fuente que me regalaste para agradecerte el recordarme lo que tengo.
Link para escuchar y ver el poema visual:
Juana de los Angeles Mejía Marenco. Soy hija de migrantes radicados en México; crecí entre personas artistas de la palabra escrita, poetas, del teatro, la pintura y la música. Mi padre, Ernesto Mejía Sánchez, me bendijo con prosemas para tener presente que “toda la maravilla, toda la merecemos”.
La formación como Socióloga -UAM- y la Maestría en Ciencias de la Comunicación, -FCPyS-UNAM- me fortaleció en el ámbito de la investigación social, sus metodologías y temáticas alrededor de los derechos humanos, género, cultura de paz, buentrato y autocuidado, con mujeres, mujeres indígenas, niñez/ adolescencia y población migrante en coordinación con diversas Instituciones Nacionales e Internacionales* y de manera independiente.
He participado como alumna en talleres de:
Frida Varinia Ramos. Cuento Fantástico. 2023.
Corriendo con Lobas/Medeas. Red de Jóvenes Investigadoras de la Escena. 2022.
Ethel Krauze. Secretaria de Turismo y Cultura del Estado de Morelos y el Proyecto Mujer: escribir cambia tu vida.2009- 2022.
Montserrat Ocampo; Elizabeth Delgado e Ibán de León. Narrativa y Poesía, en la Escuela de Escritores Ricardo Garibay. Cuernavaca, Morelos.
Fina Sanz.
Rosa Nissan. Biografía novelada.
Maravilloso. El filo poético, esencia femenina que se trasluce en formas nostálgicas, otras cotidianas, también están las sensuales y las muy divertidas; las filosóficas y las interpretativas, bello abanico oral que pinta de cuerpo entero, y de alma también, la rica personalidad de Juana de los Angeles.
Impresionante, una cohomprensiva lista, una secuencial confesión, declaraciones sistemáticas pero todas ellas Rubik de imágenes, de emociones. Siempre me gustó como lo escribes-describes-enlistas… casi puedo pasar mis ojos por cada objeto-emoción-recuerdo. Gracias.