Mutación religiosa y otras minificciones
MUTACIÓN RELIGIOSA Las estatuas lloraban sangre, la miraban a los ojos y algunas le hablaban. Los ventanales se rompieron en pedazos y las sillas se movían por sí solas. El santuario celestial parecía estar abandonado. Miró una puerta roja, caminó hacia ella y la abrió. Ahí estaba, sosteniendo un libroCuéntame más…