Déjà vu
Lees las últimas líneas con horror. “¡No! ¡No! ¡No!”. Cierras el libro y lo lanzas sobre la mesa con violencia, como si sacudieras un escorpión que caminaba sobre tu brazo. Intentas drenar las emociones que sientes con una larga exhalación que se convierte en un grito ahogado. Que supure laCuéntame más…