Me asumí tan frágil
como el ala de un insecto,
desprotegida como la pluma
que se desprende del ave
y cae lentamente en el suelo.
Me faltan tus manos
que bebían mis lágrimas.
Me falta tu boca
amuleto que ahuyentó
mis pesadillas.
Busqué bajo tu almohada
el polvo de hadas.
Hurgué en tus gavetas vacías,
intenté liberar tus pájaros
pero estaban ya marchitos.
Rocié agua en tus macetas
y las flores eran una parvada
que huyó con rumbo al sur.
La casa se cubrió con la ceniza
del último cigarro que fumaste
y tomé con mis dedos una brizna
para escribir tu nombre en la acera.
Tu nombre, tu nombre
como anzuelo prendido
a mi corazón.
*Poema del libro “El oficio de los Muertos” Ed. Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, 2021.

Docente, comunicadora y escritora. Ha publicado los libros Agonía de la mirada (2019),
Un puñado de pájaros se desflora y otros poemas (2021) y El oficio de los muertos
(2021). Ganadora del certamen Voces al Sol 2020, convocado por la Universidad
Autónoma de Ciudad Juárez en la categoría de poesía. Seleccionada para formar parte
la cuarta Antología de cuento corto de escritoras mexicanas.