TRIBULACIONES

Coronel

Hubo un tiempo 

en que tu voz era guerra 

y tus ojos campo minado.

No existía tregua, 

sólo silencios 

que nunca comenzaban.

Barcos de vapor

Se me va de la boca

un suspiro que lleva tu nombre,

pero que no es tuyo.

Se me escapa

como el globo

que huye presuroso

de las manos de un niño

que cree poseer al mundo.

Reteniendo el aliento

me creo dueña de lo impronunciable.

Un secreto hecho de oscuridad y lluvia.

Las luciérnagas

alborotan el mar de mi boca,

el agua hierve

-como si por dentro hiciera tanto calor-

se evapora y se va en forma de suspiro.

A veces,

cuando miro las ramas de los árboles,

pienso en el momento

en que ambos callamos

para otorgarle al otro

una tierna mirada de cariño.

Entonces,

estoy sentada viendo la tarde caer

y se me ha escapado un suspiro.

Brújula

Yo seré la peregrina

que camine descalza

por tu piel.

La que con ojos de embrujo

            y pócima de luna,

custodie,

niño, 

tu sueño.

            Porque tu nombre es arena

y tu voz

   eco de mar.

Porque,

hace tiempo que tú duermes

y yo te canto una canción.

El viento es una barca

y es tu cuna

y en ella te meces.

Porque,

si yo fuera

la niña que sostiene tu mano,

         querido capitán,

no tendría que ser más

una peregrina.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *