Los quince años
Yo no quiero casarme, ni quiero crecer jamás… Es domingo por la mañana, mi madre se sienta al borde de la cama, cuando giro mi cuerpo a medio sueño, mis piernas chocan con su espalda. Aún adormilada escucho su voz diciendo que se nos hace tarde. No sé de quéCuéntame más…